Critican candidatura de Schaulshon a alcaldia de Santiago

La Nación
14.02.2007

.Rodrigo Durán
Con la intención de no quedarse atrás en las municipales, los partidos de la Concertación también han comenzado a pujar por la alcaldía de Santiago, principal botín que entregan los comicios de octubre de 2008. A los nombres que han tanteado el terreno, como Marcelo Trivelli (DC) y José Antonio Viera-Gallo (PS), se sumó ahora el de Jorge Schaulsohn, quien en diciembre pasado fuera expulsado del PPD.

En 2004, Schaulsohn fue el candidato del PPD y de la Concertación tras una reñida disputa interna con el entonces intendente Trivelli y, finalmente, compitió contra el candidato aliancista Raúl Alcaíno. Éste se convirtió en el edil capitalino, ganándole por 42,6% versus 45,7%.
Pese a ello, el ex presidente del PPD aprovechó la dubitativa repostulación del ex animador de televisión y se lanzó a la carrera municipal, esperando que el terreno conquistado en la cerrada lucha de hace dos años le permita partir con algo de ventaja. Sin embargo, hay un detalle: en la última negociación municipal, el cupo de Schaulsohn lo obtuvo el PPD luego de una compleja transacción política le que le significó perder a otros 16 candidatos.

Es por eso que el presidente (s) del PPD, Ángel Bozán, señaló ayer a La Nación que “el partido tiene el cupo en posesión”, y que ese era el punto de partida para cualquier nuevo arreglo con alguien de sus filas, lo que, obviamente, dejaba fuera a Schaulsohn por su actual condición política.
El regreso de Schaulsohn y las razones esgrimidas para sondear apoyos no convencen a Bozán, quien con dureza señaló que “no resiste análisis que alguien, que perdió la elección anterior, pretenda ser el abanderado de la misma Concertación que lo apoyó y a la que ha denostado públicamente en el último tiempo”.

A juicio de Bozán, la pretensión del expulsado dirigente se dirige a medir el apoyo que concita su nombre en el “mercado”, para convertirse en la bisagra entre la Concertación y la derecha. Es decir, la llave que puede otorgar la mayoría a uno u otro bloque.

-¿Qué pretende Schaulsohn con esta candidatura?
-Encaminarse, haciendo ciencia ficción, a una candidatura independiente por Santiago, para ver cuanto apoyo concita. Porque todos los esfuerzos de Schaulsohn apuntan a establecer una minoría que tenga la fuerza suficiente para inclinar finalmente las elecciones a favor de la derecha, y así negociar el Poder con ellos.
-Pero él se declara de la Concertación.
-Y al mismo tiempo la perjudica. Y un día dice que (Ricardo) Lagos impulsó un sistema de corrupción, y al otro día dice que es amigo de él. Esa es la politiquería rasca que debemos erradicar de Chile, la de figuras mediáticas que se ven a sí mismos en un limbo. Ser alcalde por Santiago es un tema trascendente, político, que tiene repercusiones presidenciales. No es para tomarlo a la chacota.
-¿No cree que prospere?
-No. Esto es un volador de luces. Probablemente una candidatura independiente, por fuera de la Concertación, como una alternativa entre la Concertación y la derecha. ¡Pero si él ha planteado la superación de la Concertación, formando alianza con sectores liberales de RN, desde hace varios años!
Schaulsohn había optado por la cautela y, en declaraciones a El Mercurio, condicionó su retorno a las lides electorales a lo que se decida en el seno de “ChilePrimero”, movimiento fundado por el senador Fernando Flores y el diputado Esteban Valenzuela al renunciar al PPD. Al tiempo que confirmó su interés por la zona, le hizo un gesto a sus nuevos soportes políticos, diciendo que “esas son decisiones más colectivas”.
De paso y para alejar cualquier duda, descartó tajantemente que su postulación se enmarcara en una lista de la Alianza derechista. “Eso es algo que no me he planteado en ningún momento”, dijo. Con ello, reafirmó lo dicho a principios de enero: que no tiene pensado dejar la Concertación para sumarse a los postulantes de la Alianza. En la derecha ya hay dos nombres para reemplazar al dubitativo Alcaíno, ambos de la UDI: Gonzalo Cornejo, alcalde de Recoleta, y Pablo Zalaquett, edil de La Florida. LN