lunes, 18 de diciembre de 2006

Discurso de SERGIO BITAR en aniversario del PPD

PPD, UN NUEVO RUMBO DISCURSO DEL PRESIDENTE DEL PPD, SERGIO BITAR
LOS MILITANTES, SIMPATIZANTES Y AMIGOS DEL PPD 19°ANIVERSARIO,

16 diciembre 2006, Círculo Español.

Un martes 15 de diciembre de 1987 a las 6:30 de la tarde, hace ya 19 años, bajo la dictadura de Augusto Pinochet, en este mismo lugar, fue creado el PPD. Y nació con un sello imborrable: la lucha por la libertad y la democracia.

Como lo dijo entonces Ricardo Lagos: "El dilema en Chile hoy es dictadura o democracia".

Fuimos y hemos sido hasta ahora una pieza fundamental en la Concertación de Partidos por la Democracia, que permitió derrotar en las urnas a la dictadura, recuperar la libertad, la democracia y crear nuevos espacios de desarrollo económico, social, cultural y humano para los chilenos y chilenas.
Hemos sido protagonistas en la conquista de nuevas libertades orientadas a terminar con la exclusión de toda índole. Desde la batalla por los derechos y la igualdad de oportunidades para la mujer, los derechos humanos, hasta las reformas a la Constitución que nos dejó la dictadura, pasando por centenares de iniciativas para mejorar la vida de todos.

Hemos contribuido a que los chilenos y chilenas progresamos en justicia y desarrollo y a reubicar a nuestro país en el concierto de naciones.

El pueblo de Chile ha sabido reconocer las ideas y valores que nos inspiran, y nos ha dado un lugar privilegiado en la política nacional, en cada región, en cada localidad.

De nuestras filas surgió un Presidente de la República, uno de los más destacados Presidentes de Chile, según la evaluación ciudadana, quien se retiró de su cargo con la más alta popularidad que un gobernante haya tenido en nuestra historia.

El PPD es un partido que nace de la voluntad popular, del espíritu libertario y democrático de nuestro pueblo. El PPD es producto de la lucha de hombres y mujeres que soñaron y aún sueñan con una vida mejor para todos.

Estas cosas, y muchas más, tal vez olvidadas en el devenir cotidiano, tal vez miradas como simples cosas del pasado, son las cosas esenciales que debemos valorar cuando se nos confunde el sentido. Cuando los problemas del día a día nos llevan a cometer errores por falta de perspectiva y de visión.

El PPD ha de renovar sus proyectos y asumir metas ambiciosas
nuevas. Es el cambio al que aspiramos.

El PPD no es una máquina de hacer votos. Ni una bolsa de puestos de trabajo.

Ni un lugar para contiendas personales o de grupos pequeños que ambicionan más o menos cuotas de poder.

No señores.
Soy presidente de este partido por la voluntad de ustedes y en este aniversario mi deber es recordar el sentido profundo de nuestra acción política.

Mi deber es señalar lo mejor de nuestro pasado y poner lo mejor de lo nuestro mirando hacia el futuro.

Mi deber es representar aquí al pueblo que nos dio vida y nos entregó una misión que aún no está cumplida.

Y mientras no se cumpla la misión que nos encargó Chile, los invito a seguir construyendo con el espíritu que nos vio nacer.

Quien no desee completar esta misión está en libertad de dejar este espacio.

Los imprescindibles, como dijo alguien, son los que luchan toda la vida.

La profundidad del debate nos indica que lo que está ocurriendo no es sólo una serie de escaramuzas entre grupos rivales. La crisis revelada estos meses es parte de un fenómeno político mayor que afecta a todos los partidos: la pérdida del sentido de la política en la sociedad chilena hoy.

La búsqueda del bien común ha sido desplazada por el interés personal, la lucha contra la injusticia por la figuración, el orgullo del servicio público por el clientelismo.

Esta realidad requiere de acciones drásticas para cambiar al PPD.

Está en el interés nacional de todos los demócratas evitar el desprestigio de la política y la agresión y menosprecio a los partidos. Estos son instituciones esenciales.

Conscientes de esta situación, el PPD y sus órganos directivos, actuando por unanimidad, en los 6 meses desde que asumí la conducción del Partido, hemos intensificado acciones en dos ámbitos.

El más inmediato: enfrentar toda irregularidad con dureza, y llevar a cabo cambios internos importantes, como las resoluciones del Tribunal Supremo y los aprobados en el último Consejo Nacional, como nos comprometimos, y el más esencial, un nuevo proyecto de partido, un nuevo rumbo, las nuevas ideas para liderar las transformaciones modernizadoras acordes con el nuevo Chile que queremos construir, con una visión estratégica y un sentido nuevos.

Las nuevas medidas

Desde que asumí esta nueva dirección, hace exactamente 6 meses, hemos actuado con la mayor firmeza para enfrentar toda irregularidad, atisbo de corrupción o clientelismo.

El último Consejo General ha adoptado medidas inéditas.
1.- Ha constituido una Nueva Comisión de Ética que ha comenzado hace unos días su actividad de normar y prevenir.
2.- Ha creado una Nueva Comisión de Gobierno, de alto nivel, cuya tarea es elegir a los y las mejores entregando ternas para postular a cargos de Gobierno, si somos requeridos, para cambiar las prácticas anteriores.

3.- Ha elegido la Comisión Revisora de Cuentas, que tampoco operaba, para la mayor transparencia en el funcionamiento del Partido.

4.- Los integrantes del Tribunal Supremo, la Comisión de Gobierno y la Comisión de Ética serán elegidos por 2/3 del Consejo General.

Puedo afirmar que las instituciones del partido ahora están funcionando y en los próximos meses mejoraremos aún más esta operación.

Pero la decisión más trascendente, que constituye una gran gesto de desprendimiento para la renovación política ha sido la decisión de limitar el número de reelecciones de cargos de elección popular.

Somos el primer partido de Chile que implanta esta norma en su legalidad interna: una vez para senador; dos veces para diputado, alcalde, concejal o CORE; y una vez para cargos en el Partido.

Pero más allá de lo que nos ha ocupado en el presente, los invito a mirar un nuevo Chile y a emprender UN NUEVO RUMBO PARA EL PPD.

El nuevo Chile que se abre está signado por dos hechos mayores: el fin físico Pinochet y el próximo inicio del tercer siglo de nuestra República.

Hemos contribuido a ampliar las libertades. Hemos logrado una ejemplar democracia representativa. Pero Chile y los chilenos soñaron más allá cuando dieron origen a la gesta de la democracia. Todos soñamos más allá…

Queremos verdadera libertad y verdadera democracia para todos, fundada en auténtica igualdad de oportunidades y en auténtica participación democrática. Y eso aún no lo hemos logrado.

Está hecha la mitad de la tarea. Y yo no quiero que quedemos con la tarea a medias.

El PPD vino con toda la fuerza de Chile a construir una Patria más digna, más creativa, más libertaria, más emprendedora, más justa y, por sobre todo, más humana. Sí queridos amigos y amigas…. una patria más humana, donde la gente pueda ser cada día un poco más feliz.

No quiero hoy eludir la palabra felicidad y bienestar humano. Esto es lo realmente importante para los chilenos y chilenas de hoy: la posibilidad de ser y de vivir cada día un poco mejor, con su familia, con sus hijos, con sus sueños y con sus realizaciones.

En el mundo entero, los líderes progresistas, están mirando este norte como el único gran fin de la política. Porque la única política que tiene sentido es aquella que se vincula a los sueños, emociones y aspiraciones de las personas.

¿Cómo ser más felices como sociedad, trabajando en cooperación, en auténtica libertad y con verdadera participación?

Esta es la interrogante de hoy para un partido político progresista y humanista.

Quiero invitarlos a hacer la parte de la tarea que nos falta:

Para eso debemos derrotar ahora a los desencantados, en primer lugar, a quienes han dejado de soñar y creen que hay que seguir haciendo más de lo mismo.

Tenemos que derrotar la pérdida de sentido de miles de ciudadanos entrampados en el exceso de trabajo, mal remunerado, en el consumo, en el endeudamiento, en la exclusión de las decisiones, en la depresión, en la eterna y desigual batalla de vivir en la ley de la selva, donde los más grandes se comen a los más chicos.

Tenemos que derrotar a quienes dejaron de creer en la gente y se elevan como gurús de nuestra vida nacional.

Tenemos que derrotar a quienes piensan que su cuota de poder es para servirse a sí mismos. Todos aquellos que olvidan que están en sus cargos por voluntad del pueblo, a quien están obligados a servir, se apartan de la razón de ser del PPD.

Tenemos que derrotar la falta de creatividad e innovación en nuestra manera de hacer política. Vivimos en un nuevo mundo, con un nuevo tipo de seres humanos, que tienen necesidades y expectativas diferentes. Y principalmente buscan, practican y exigen un nuevo modo de comunicarse.

Tenemos que llamar, incluir, invitar, abrir todas nuestras puertas a los jóvenes. Lograr que el aire limpio y puro de los nuevos sueños entre por nuestras ventanas, que la casa se inunde de ideas, talento, amor, ganas de vivir, nuevos sueños y nuevas realidades.

Invito a los jóvenes de mi Patria desde aquí a ocupar el PPD, a tomarse el PPD, a ocupar el futuro con ideas, imaginación, belleza y con el compromiso de no olvidar NUNCA para qué estamos aquí, cuál es sentido de todo esto.

Si para todo esto hay que quebrar huevos…. bueno… aquí estamos, quebraremos todos los huevos que sean necesarios. Así derrotamos un día a una dictadura brutal … ¡Cómo no lo vamos a hacer ahora para derrotar nuestras propias oscuridades

Con la fuerza de las ideas, el compromiso con Chile y el poder de la acción.

Si hoy tuviéramos que resolver adonde concentrar nuestras energías y capacidad, para redoblar la Fuerza del Cambio ¿qué haríamos?

Si hoy nos preguntamos cuáles son los resortes políticos y sociales para un nuevo impulso, en el nuevo Chile, equivalente al que nos propulsó en estos años ¿que diríamos? ¿Qué forma asumen hoy los valores que nos inspiran? ¿Cuáles son nuestros objetivos nacionales para un Chile mejor y las políticas públicas para lograrlo?

El nuevo rumbo que emprendamos ahora debe asentarse en nuevas ideas
para el nuevo Chile.

De nada serviría mejorar nuestra organización, acentuar la disciplina, incrementar el trabajo en la base social si no compartimos una visión, un sentido de misión para esta nueva etapa que atraiga a los jóvenes y mujeres, trabajadores y profesionales.

Las nuevas ideas para un Chile nuevo son la fuerza movilizadora.

Allí debemos radicar nuestro esfuerzo.

¿Cuáles son las ideas fuerza para el Bicentenario de la República?
¿A qué aspiramos los chilenos, desde una perspectiva de centroizquierda progresista?

Les propongo, queridos amigos y amigas del PPD de todo Chile y a todos los progresistas iniciar una conversación productiva sobre estas ideas.

Cuatro objetivos principales deben orientar nuestra acción para dar un gran paso al Bicentenario:
Plena participación en la generación de riqueza y empleo de calidad.
Plena participación ciudadana.
Derechos básicos garantizados y protección de los más vulnerables.
Plena Integración humana y ambiental.
La mayor preocupación de un buen Gobierno es y será siempre dotar de empleos decentes y de creciente calidad a cada uno de sus habitantes.

El bienestar y la felicidad de una persona y su familia dependen de buenos empleos.
Somos más ricos que antes. No es lógico que aumente la inseguridad y el consumo de tranquilizantes.
El PPD debe impulsar todas las políticas eficaces para crear más empleo y dar seguridad al que lo tiene.

Mejor empleo significa adoptar ahora tres medidas:
1. Instalar un diálogo social permanente para dotar de más seguridad a los trabajadores.
2. Un nuevo salto en calidad de la educación y capacitación laboral para acrecentar la empleabilidad.
3. Promover con fuerza la innovación y el emprendimiento para crear y generar más valor agregado y más equidad desde la generación de la riqueza, no sólo en la distribución por "chorreo" del éxito de los más poderosos.

Plena participación ciudadana
La democracia se perfecciona con el empoderamiento de los ciudadanos. Yo cuento, tengo poder, me comprometo, me siento parte, participo... son las aspiraciones de los chilenos hoy.
Conseguimos y afirmamos la democracia representativa. Hoy profundicemos la democracia participativa.
A nivel mundial, Chile presenta bajos niveles de participación.
Una Reforma Municipal es indispensable para crear nuevos espacios de participación local. La democracia cercana es una prioridad del PPD que asumiremos ahora para la elección municipal de 2008.

Hemos de precisar qué y cómo, con la gente, con nuestros alcaldes y concejales, con los dirigentes sociales.

El control ciudadano es el mejor aliado de la probidad.

Un nuevo incremento del poder local debe afirmarse en nuevos sistemas de participación, plebiscitos, referéndum y consultas.

Un sorprendente estudio sobre la Felicidad en Suiza muestra que en los cantones donde se verificaron más consultas, la satisfacción era más alta en los cantones donde no los había. Con el mismo ingreso per cápita, en los primeros la gente se mostraba más feliz que en los segundos.

*Derechos básicos garantizados y protección de los más vulnerables
Una sociedad que llega al desarrollo puede serlo sólo si tiene garantizados los derechos básicos y la calidad de vida de todos sus ciudadanos.
No podremos decir que Chile alcanza el desarrollo mirando sólo cifras macroeconómicas, sin resolver el problema de la pobreza, la salud mental y física de nuestra gente, la vivienda, la educación, el acceso a la cultura, el disfrute del tiempo libre, las condiciones para una convivencia armónica con el medioambiente y el derecho a la información y participación ciudadana.

Son derechos básicos en una sociedad democrática que aún debemos conseguir.
De esto estamos hablando cuando expresamos nuestras ideas sobre la felicidad y el bienestar de las personas.
El bienestar y la seguridad de las personas más modestas es un objetivo urgente.

Los adultos mayores carecen hoy de una protección mínima aceptable.
La Reforma Previsional será la principal realizada durante los años de Concertación a favor de los más ancianos.

Allí estará el PPD.
La presidenta Bachelet ha anunciado una reforma revolucionaria para la justicia y la familia. En 2009 se garantiza que toda persona de más de 65 años, perteneciente al 40% más modesto contara con $75. 000 de pensión básica solidaria para vivir con seguridad su último periodo de la vida. Y a partir de los años siguientes el 60% de las personas de menores ingresos.

Así, una pareja de más de 65 años tendrá $150.000 mínimo para vivir.
Cuidado significa también salud, afianzar el Plan Auge, viviendas con dos dormitorios, camas para todos los niños, barrios decentes, con lugares de esparcimiento, parques, espacios para la cultura.
Allí estará el PPD.

Así lograremos un país más cohesionado, con sentido de comunidad.

El cuidado de los débiles, la protección social, un nuevo estado de bienestar deben establecerse como un derecho de cada ciudadano, que la sociedad debe garantizar con un mínimo básico para todos.

Podemos hacerlo con el nivel actual de desarrollo económico.
Hacerlo nos permite, además, lograr más crecimiento y productividad.
Estos derechos básicos materiales requieren, a su vez, de la defensa de los derechos del consumidor, otorgándole al ciudadano la información y la protección necesarias para contrarrestar el abuso de los grandes proveedores de servicios y bienes.

Estos derechos son una conquista para una sociedad más civilizada.

Lograrlo es nuestro propósito como PPD.

La gente nos conoce desde hace 19 años. Siempre estaremos del lado de los más vulnerables.

*Plena Integración humana y ambiental.

El planeta se dirige a un colapso si los seres humanos no reaccionamos a tiempo.

El PPD asumió desde sus albores la vanguardia en la defensa del medio ambiente.

Debemos proseguir.

La recuperación de una relación armónica entre las personas y el medio ambiente, formando parte de un todo integrado es sin duda el gran sueño que puede permitir no sólo la defensa de la flora y la fauna, de la tierra, del aire, el agua y los recursos naturales.

Se trata del regreso de lo humano a la naturaleza para recuperar la armonía, para vivir mejor, para reencontrarnos con la raíz y proyectar una vida mejor.

La naturaleza puede decirnos cómo recuperar el sentido de lo humano. Cómo vivir en paz, cómo trascender, cómo cooperarnos, cómo ser más justos, más tolerantes y más creativos.

La principal prioridad hoy es articular las políticas energética y medio ambiental empleando las mejores tecnologías disponibles en los países avanzados, iniciando las investigaciones de otras formas de energía.

Estaremos, en primer lugar, con propuestas serias y viables, superando la mera denuncia.

Los cuatro objetivos señalados se inspiran en los valores de ecuanimidad, altruismo y solidaridad. Es decir, se sustentan en aquellas virtudes de la sociabilidad, la cooperación y la justicia, que generan más bienestar y satisfacción al ciudadano.
La política es una función noble, y los partidos instituciones creadas para la conducción de una sociedad hacia un mayor bienestar y, por tanto, deben tener en vista el bien común. Para lograrlo han de promover conductas cooperativas, de preocupación por el otro y no sólo de sí mismo.

Quienes actúen en política deben ser mejores y dar el ejemplo en el ejercicio de la solidaridad.

La ética en política supone la honestidad y la probidad, pero es más que eso. Es el cultivo de actitudes, a través de normas, instituciones, educación y el ejemplo, que contribuyan a crear una sociedad menos egoísta, más colaborativa, más igualitaria, más segura.

No se puede ser feliz en medio de la infelicidad de los demás, ni justo en medio de la injusticia. El progreso social se acrecienta con el trabajo en equipo y la colaboración, en una sociedad cohesionada.

Ese es el desafío de esta hora, como lo fue la lucha por la democracia en nuestros inicios. Nuestro deber es iniciar un nuevo rumbo.

El PPD recupera el sentido de la política.

Los chilenos podemos aspirar ahora a recuperar el sentido de la vida y alcanzar grados crecientes de bienestar y felicidad.

El PPD puede ocupar un lugar trascendente en esta construcción de un nuevo futuro, con ideas y acciones que nazcan desde los sueños más profundos de los chilenos y chilenas. Sobre todo ahora que el país no tiene ninguna razón para seguir postergando esos sueños.

En el proceso de ejercer la acción política podemos equivocarnos.

Lo que nos permite volver a nacer cada día es la conexión con los valores, con el sentido de nuestra acción. Y de eso estamos hablando ahora.

El PPD tiene aún muchos desafíos mientras existan chilenos que sueñen con un bien común, con más igualdad, con ejercicio pleno de la libertad y la creatividad, con más participación y con más humanidad. Los progresistas sabemos que los cambios sociales y personales son la constante de la historia.

Quién no está dispuesto a cambiar debe pertenecer a un partido conservador.

Ahora tenemos que cambiar al PPD y cambiarnos a nosotros mismos para ser válidos con nuestras propias definiciones y conciencia. La profundidad y magnitud de los cambios debe decidirla toda nuestra gente, en un diálogo abierto, verdadero, crítico, realista y creativo.

Debemos seguir llenando el espacio progresista y democrático que es una alternativa real de convivencia en todo el mundo.
Tenemos raíces en grandes hombres y mujeres progresistas que nos dejaron este legado. No es tiempo de ocultar la cabeza, es tiempo de levantar la mirada, recuperar los valores, retomar las fuerzas y cumplir con dejar a las nuevas generaciones un espacio de libertad, igualdad y fraternidad.

Cambiar es un proceso natural. Cambia todo cambia … El PPD es un espacio abierto para pensar, proponer, criticar, cambiar, crear, transformar, proyectar, mejorar la vida y la sociedad, sobre todo para los jóvenes.

Tómate el PPD, okupa el futuro.

Muchas gracias y feliz aniversario para todos.

No hay comentarios.: