PPD al borde del quiebre tras expulsión de Schaulsohn

123.cl
28.12.2006

La abrupta salida de Schaulsohn del Partido Por la Democracia (PPD) pone fin a 17 años de militancia, a pesar de ser uno de sus próceres. Fue fundador junto a Ricardo Lagos en 1989, y su salida amenaza con quebrar al partido.

Schaulsohn había denunciado la entrega de fondos reservados del Gobierno a los partidos de la Concertación, lo que el Tribunal Supremo calificó como atentatorio contra la honra de personas e instituciones. Desde Estados Unidos, Schaulsohn ratificó sus dichos y atacó con todo a la directiva del partido que preside Sergio Bitar.

"Lo único que puedo decir es que ellos saben que estoy diciendo la verdad", recalcó Schaulsohn.

Lo más llamativo es que el mismo tribunal actuó con suma cautela en otros casos. El senador Guido Girardi y los diputados Rodrigo González y Laura Soto, involucrados en los casos Publicam y planes de empleo, no han recibido ninguna sanción y el ex director metropolitano de Chiledeportes y su jefe de gabinete, sólo fueron suspendidos.

"Aquí hay una sola línea, no hay doble estándar y quiero señalar con total nitidez que velaré firmemente por el trato igual y por las medidas más claras de sanción a quien cometa una irregularidad", aclaró Sergio Bitar.

Pero Schaulsohn no se iría solo. El senador Fernando Flores y varios diputados podrían renunciar al partido, provocando una crisis total.

Esteban Valenzuela, diputado PPD, dijo que "renuncio al Partido Por la Democracia si no dan marcha atrás a este acto de terrorismo político, autoritario y dictatoria

Desde la oposición miran incrédulos e insisten en que se ha instalado una operación silencio.

El presidente de Renovación Nacional, Carlos Larraín, manifestó que "él se ha revelado contra un ambiente interno del PPD que quiere reprimir cualquier tipo de discrepancias y que quiere alinearlos en un sentido siciliano y Schaulsohn no pertenece a la mafia siciliana".

En La Moneda cunde la inquietud, aunque se optó por el silencio. Sólo se reiteraron las críticas contra las denuncias generales.

Por ahora Schaulsohn evalúa su futuro. No descarta formar un nuevo referente, mientras las fisuras desatadas por sus declaraciones pueden terminar por quebrar un partido cada vez más débil.